lunes, diciembre 13, 2004

-Creo que sí -repuso Warweave considerando la pregunta de su colega. Y se dirigió hacia el dispositivo que había instalado Suthiro bajo la vitrina. El inhalador que había separado de su sitio pendía de su mano-. Sí -continuó-, creo que puedo presentar una demostración convincente.
Presionó el inhalador contra su rostro y tocó la palanca. En la consola, el timbre de alarma del aire sonó con un repetido campanilleo.
-Si vuelve atrás la palanca -dijo Gersen- cesará el ruido.
Warweave se aproximó y obedeció el consejo de Gersen.
-Verán -continuó Kirth- que Warweave está tan sorprendido como ustedes. Se imaginó que esa palanca controlaba los depósitos del gas que ustedes encontrarán bajo sus asientos, de aquí el uso que pensaba hacer del inhalador. Yo vacié los depósitos y cambié las conducciones de la palanca.
Kelle miró bajo su asiento y sacó fuera la caja. Miró a Warweave.
-Y bien, Gyle, ¿qué tienes que decir a esto?
Warweave arrojó furioso el inhalador y les dio la espalda con disgusto y confusión.
Repentinamente, Detteras tronó:
-¡Warweave! ¡Dinos la verdad!
El aludido habló por encima del hombro.
-Ya habéis oído la verdad de labios de Gersen.

Jack Vance "El rey estelar"