sábado, octubre 30, 2004

Gersen dirigió la lente hacia un picacho en la demarcación existente entre la luz y la sombra; el objeto no parecía moverse ni alterar su posición con respecto a la línea de sombras: aparentemente aquel mundo presentaba la misma cara a su compañero, al igual que el planeta Mercurio en relación al Sol. En tal caso, el refugio de Dasce tendría que hallarse en la superficie iluminada cerca del ecuador, directamente bajo el sol. Escudriñó con minuciosidad toda la región, bajo la máxima magnificación del aparato. El área era muy extensa, existían en ella una docena de cráteres de volcanes, grandes y pequeños.
Gersen anduvo buscando durante casi una hora. Warweave, Kelle y Detteras le observaban con los más diversos grados de impaciencia y sardónico disgusto. Una formación de carácter singular atrajo su atención: una meseta cuadrada con cinco montañas en forma radial al igual que los dedos de una mano. La frase del imp de Melnoy Heights le vino instantáneamente a la mente: Thumbnail Gulch (la quebrada del dedo pulgar).
Gersen inspeccionó la zona correspondiente al dedo pulgar de aquella formación orográfica en forma de mano con el máximo aumento de las lentes del macroscopio. En efecto, allí se observaba un pequeño cráter, que parecía mostrar un color ligeramente distinto y una estructura diferente a los demás. Mirándolo con detenimiento se observaba un ligero resplandor y la mota blanqueada de algo extraño a aquel mundo muerto. Gersen redujo el aumento de las lentes y estudió al terreno circundante. Aunque Dasce no pudiese detectar la aproximación de una nave a distancias planetarias, el radar podría avisarle de espacionaves que estuviesen próximas a tomar tierra en sus cercanías. Hizo descender la espacionave en dirección a otro extremo alejado del lugar en cuestión y lentamente, oculto tras el horizonte para tomar tierra tras la meseta que formaba la palma de aquella mano, lo que podría proporcionarle la ocasión de sorprender a su enemigo.

Jack Vance "El rey estelar"