martes, marzo 29, 2005

Zaum jugueteó con varios fragmentos de bronce que había sobre su mesa.
-Yo soy otro. ¿Cuál es su información?
-Ayer oí tres nombres... unos individuos que habían trabajado para Kokor Hekkus hace diez años. Puede ser que estén o no en sus archivos.
-¿Cuáles son sus nombres?
-Ermin Strank, Rob Castilligan, Hombaro.
-¿Raza? ¿Mundo? ¿Nacionalidad?
-No lo sé.
Zaum bostezó, se estiró, miró Avente a través de la pared-cristal. Era un día soleado, aunque ventoso; a lo lejos, sobre el Océano Taumatúrgico, rodaban grandes masas de cúmulos. Después de unos instantes de plácida reflexión, Zaum volvió a su escritorio.
-No tengo nada mejor que hacer de momento.

Jack Vance "La máquina de matar"