lunes, abril 02, 2007

De Vida, volumen I, de Unspiek, barón Bodissey:

"El hombre perverso es una fuente de fascinación: las personas normales se preguntan cuál es el motivo de tales excesos en el comportamiento. ¿Deseo de riqueza? Un motivo normal, sin duda. ¿Anhelo de poder? ¿Venganza contra la sociedad? Démoslo por garantizado. Pero cuando se han logrado el poder y la riqueza, y la sociedad ha sido reducida a un estado de humillante sumisión, ¿cuál es el siguiente paso?
La respuesta es obvia: la maldad por la maldad.
La motivación, aunque incomprensible para el hombre normal, es, sin embargo, apremiante y real. El criminal se convierte en el resultado de sus propios hechos. Una vez superada la transición, un nuevo conjunto de valores entra en juego. El criminal inteligente reconoce su maldad, y comprende a la perfección el resultado de sus actos. Retrocede a un estado de solipsismo para calmar sus remordimientos, y comete actos de perversión exacerbada, lo que provoca en sus víctimas la sensación de que el mundo se ha vuelto loco."

Jack Vance "El rostro"