sábado, febrero 18, 2006

El 3 de octubre, Navarth pagó 50,000 UCL al barón Caspar Heaulmes en concepto de daños y perjuicios y fue dejado en libertad sin cargos, al igual que el resto de los invitados.
Gersen se encontró con Navarth en la alameda que había frente al Palacio de Justicia.
-¿Qué quiere de mí ahora? ¿Otra prueba de virtuosismo? Le advierto que no me dejaré manipular por segunda vez.
-Me he enterado de que un tal Ian Kelly fue asesinado ayer.
-Ian Kelly tuvo la desgracia de parecerse demasiado a usted en estatura y porte. -Navarth meneó la cabeza con tristeza-. Ay, ese Vogel. Aborrece la frustración tanto como un aguijón de abeja.
-Hay veinte nombres en la lista del artículo periodístico. ¿Cuál es el de Zan Zu?
-Elija el que quiera. Tanto da uno como otro.
-Leo aquí "Drusilla Wayles, dieciocho años". ¿Es ella?
-¡Kalzibah misericordioso! ¿Por qué ha de tener un nombre? ¡Un nombre es una carga! Algo que vincula a un conjunto de circunstancias incontroladas. ¡No tener nombre es ser libre! ¿Es usted tan terco que no puede imaginar una persona sin nombre? Ella es la que los demás eligen que sea.
-Es extraño. Se parece sorprendentemente a la Jheral Tinzy de hace treinta años.
Navarth se enderezó en la silla como alcanzado por un rayo.
-¿Cómo lo sabe?
-No he perdido el tiempo. He escrito esto, por ejemplo.
Gersen sacó un falso número de Cosmópolis. El rostro del joven Vogel Filschner ocupaba la portada, sobreimpuesto sobre el contorno de una figura alta, gris y ominosa. El pie rezaba: "El joven Viole Falushe; Mis recuerdos de Vogel Filschner, por Navarth".
Navarth le arrebató la falsificación y leyó el artículo de un tirón.

Jack Vance "El palacio del amor"