jueves, abril 21, 2005

-Olguin, Rango Noventa y dos, Expediente seis.
-¿A quién desea rescatar?
-Sett, Rango Cuarenta y cuatro, Expediente siete.
-¿Cuáles son los honorarios?
-Doce mil quinientos UCL.
-¿Es usted un agente, un principal o un neutral?
-Un agente.
-Muy bien. Entregue la fianza, por favor.
El empleado contó el dinero con gran minuciosidad, lo pasó por la ranura del detector de fraudes y quedó convencido de su autenticidad. Redactó un recibo y pidió un contrarrecibo, a lo que el de Bernal se negó hasta que el individuo rescatado fuera traído a su presencia. El empleado volvió a sentarse ante este alarde de rebeldía y miró al bernalense fijamente.
-Usted no lo ha comprendido, señor. La consigna de Intercambio es la integridad. El hecho de que yo le permita entregarme su dinero es garantía suficiente de que el huésped por el que ha pagado está muy cerca, y en buenas condiciones. Sus vacilaciones y sospechas no hacen otra cosa que manchar nuestra reputación, pero también arrojan barro sobre el brillo de su calidad.
El bernalense se encogió de hombros, nada impresionado por la perorata del empleado. Sin embargo, firmó el contrarrecibo. El empleado asintió con sequedad, apretó un botón y un conserje uniformado con una chaqueta roja condujo al de Bernal a una sala de espera.
Gersen dijo su nombre y se identificó como neutral, en otras palabras, un capitalista independiente que había decidido "rescindir los honorarios" de un huésped que había rebasado los quince días estipulados para el rescate, tal vez en orden a pedir un rescate mayor y obtener un provecho.
-Éstas son nuestras "existencias" actuales.
El conserje entregó a Gersen una hoja con una lista de unos doce nombres y sus correspondientes honorarios. Gersen echó un vistazo a la lista. Hacia el final leyó:
Audmar, Daro; 9, varón
Wix; 7, hembra
Rescisión: 100,000,000 UCL
Más abajo encontró:
Eperje-Tokay, Alusz Iphigenia; 20, hembra
Rescisión: 10,000,000,000 UCL
Gersen leyó las cifras y parpadeó. ¿Un error tipográfico? ¿Diez mil millones de UCL? ¡Un rescate sin precedentes, una suma imposible! Cien millones ya eran inusuales, aunque en la lista, comprobó, había siete u ocho huéspedes con rescates fijados en 100,000,000 UCL. Una enorme suma de dinero, pero sólo la centésima parte de diez mil millones. Algo muy extraño estaba pasando. ¿Quién podría pagar diez mil millones de UCL? Sobrepasaba el presupuesto de la mayoría de los planetas.

Jack Vance "La máquina de matar"